viernes, 21 de mayo de 2021

MONTE DEL TEMPLO

MONTE DEL TEMPLO

 

 

Era una figura sin nombre

que contemplaba los perfiles

que había modulado el tiempo

dentro de un territorio

al que mostraba su respeto.

 

Apenas era un hombre

ubicado a tres metros de la entrada,

detenido en el tiempo

como un punto en la tierra

que giraba sobre sí mismo

buscando vida,

un fiel observador de la cultura,

la tolerancia, y el respeto,

que miraba con mucho asombro

la plaza que rodean

viejos muros de contención

y once puertas de entrada.

 

Tenía entre sus manos

las páginas de un libro antiguo.

El tibio sol de octubre

iluminaba escenas milenarias

extraídas del baúl de Babilonia,

de la tradición narrativa,

de la memoria de los hombres

y de la historia de los tiempos.

 

Sobrecogido

por el significado del lugar

que tenía ante sí,

protegió su mirada

con los blancos destellos

de un jazmín oculto en su alma.

 

Y lo hizo para no condicionarse

por las eternas luchas

entre el bien, que nos hace humanos,

y el mal endémico

que provocan las viejas pretensiones

de todos los mortales.

 

Pero no pudo contener

el peso de una lágrima

tras la lectura de los textos

que narraban la historia

de una verdad concreta

y el recuerdo de las imágenes

que siguen sucediendo

cerca de donde estaba.

 

Aquel espacio

representaba con sus formas

los senderos de muerte

trazados a lo largo de la historia

en busca de una vida eterna.

También, una oportunidad

para el respeto y la esperanza.


VISITA AQUÍ EL CANAL DE YOUTUBE: MARIANO VALVERDE RUIZ. VIDEOPOEMAS Y VIDEORELATOS.

Mariano Valverde Ruiz (c)

Todos los derechos reservados.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario