VILEZA
Para dejar a un lado la costumbre,
clausuro el cabaret de las palabras.
La exigua llama de una vil cerilla
ilumina los gestos desolados
con que interpretas todo mi silencio.
Con voces de salmodia
termina la vileza.
Ufff. Me estoy quemando.
(El fuego del instinto. Ed. Vitruvio)
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Mariano Valverde Ruiz (c)
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