YA
NO QUEDAN POETAS EN EL BOSQUE
Desde
que el bosque es bosque,
siempre
ha habido poetas
que
canten lo que ocurre cerca de ellos
como
grillos silvestres
que
portan en sus versos
la
metafísica del mundo.
Pero
ahora parece
que
los hados no son propicios
para
el vuelo de las metáforas
por
la atmósfera del planeta
y
muchos se han cansado
de
escuchar a las musas.
De
tanto mirar a los cielos,
al
tiempo pretérito,
a
la nostalgia
y
a su propio interior como alma en pena,
hay
quienes se han quedado ciegos
ante
lo que sucede cada día.
De
tanto escuchar los sones del aire,
el
canto de los pájaros
y
a su corazón solitario,
hay
quienes han perdido el oído
para
escuchar los gritos de la tierra.
Mientras
tanto,
hay
un presente que agoniza
con
el vértigo de la muerte
en
la sangre del mundo,
un
paisaje construido por la banalidad
que
hiela el futuro,
y
una voz silenciada
en
lo más profundo de la materia
que
otorga al hombre
su
verdadera esencia
para
seguir creciendo.
Todos los derechos reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario