TULIPANES AFRICANOS
A finales de agosto
florecen
en Mar de Pulpí
los
tulipanes africanos
como
un milagro poético
de
la naturaleza.
Sus
ramas se recubren
de
un naranja vibrante
que
parece inquietar al aire
con
su fiel magnetismo.
Las
flores se acomodan
entre
las hojas y el misterio
como
una colonia de pájaros
que
celebrase la existencia
de
los colores y de la belleza.
El
hombre que las mira
se
adentra en otro mundo,
en
una dimensión etérea
que
fluye entre sus ojos
como
un río de anhelos.
Su
mirada se pierde
entre
la luz y los colores,
es
punto de partida
y,
también, de llegada,
de
la flor del deseo,
un
espacio tan próximo
a
la curva del tiempo
que
no tiene la posibilidad
de
poder valorar su fuerza.
No
pretende enlazar
el
pasado con el presente,
ni
quiere imaginar
cómo
será un futuro
que
quizá nunca tenga.
Está
en el meridiano cero
de
su vida poética,
un
punto equidistante
entre
la nada y el todo.
Poco
importa el pasado
y
sus balbuceos de tinta,
menos
aún los laureles
de
un tiempo imaginario
que
nunca ha de venir.
Solo
tiene constancia
del
instante presente
en
el que admira la belleza
de
las flores naranjas.
Y
siente el magnetismo
de
esas flores poéticas
que
convierten al tulipán
en
universo de emociones
con
miles de galaxias
donde
se escribe la vida
como
un instante irrepetible.
CANAL YOUTUBE DE MARIANO VALVERDE RUIZ
Todos los derechos reservados
(c) Mariano Valverde Ruiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario