OBLIGACIONES
La
ciudad marca nuestro ritmo.
Estelas
de vehículos con prisa
trazan
el rumbo gris de los momentos
en
que la consistencia de la sombra
es
un muro insalvable.
El
tiempo reverbera tu figura
en
las formas de los semáforos:
es
clamor por tu ausencia.
Mis
pies notan el vil latigazo del fuego
que
acecha en el asfalto,
caminan
en silencio
junto
a tiendas, espejos,
personas
que se cruzan sin mirar,
y
las obligaciones del trabajo.
Me
detengo un instante
y
pienso en cómo sería la vida
si
tuviésemos todo el tiempo
para
nuestros caprichos.
Comienzo
a imaginar
un
cielo compartido con la magia del cosmos.
Suena
el móvil en el bolsillo
y
los terribles diablos del presente
me
roban el placer
de
notar tus abrazos en las nubes
y
su húmeda ternura.
Todo
sucede mientras,
al
otro lado de la acera, con mucho disimulo,
una
pareja busca el cobijo de las sombras.
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Mariano Valverde Ruiz (c)
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